¿Apesta verdad?
Vives la continua frustración de dar lo mejor a todos menos a ti mismo.
En lo profundo, estás ardiendo. Estás en una vorágine de tareas diarias que no tienen nada que ver contigo.
Cumples las necesidades de otras personas y te olvidas de las tuyas. Eres un esclavo en manos de los intereses de otras personas.
Y el vaso de frustración y angustia se llena gota a gota, hasta el día en que se desborda ...
En la Sociedad de hoy, nos sentimos obligados a desempeñar muchos roles que se incrustan en nuestras rutinas diarias.
Lo hacemos porque desde la infancia aprendemos que debemos cumplir ciertas acciones. Que tenemos que ser responsables. Que tenemos que casarnos. Que tenemos que obtener una hipoteca. Que tenemos que tener una carrera digna. Que tenemos que bla, bla, bla ...
Y cada uno de estos roles incluyen una serie de obligaciones.
Por la mañana asumes el rol de un trabajador con tus deberes y tus responsabilidades. Tu jefe te pide un favor fuera de tus tareas normales. Y tú, tratando de complacerlo, dices "Sí".
Por la noche, eres madre o padre, cuidando a tus hijos.
Cuando hay tiempo libre, tú mismo eres hija o hijo, preocupándote por tus padres. Y cuando los planetas se alinean, te adaptas a la función de ser un buen compañero, amigo ó pareja.
Y antes de que te das cuenta de que (otra vez) no tenías ni un minuto para tí hoy, te caes en la cama como un saco de papas.
Debido a que reflejas tus propias frustraciones en los demás, haces a los demás responsables por tus propios debilidades y pones en peligro tus relaciones.
Todas estas obligaciones son autoimpuestas.
Has generado un miedo irracional a lo que las personas piensan de ti y estás condenado a vivir la vida que otros desean.
¿Pero por qué?
¿Por qué tienes que estar en el trabajo a las 8:30 a.m. (si la hora oficial de inicio es a las 9 a.m.)?
¿Por qué tienes que ahorrar dinero para ir de viaje al Caribe (si odias que el sol te brasa en la playa)?
¿Por qué tienes que cuidar a los hijos de tu amigo (si no puedes soportar a esos mocosos maleducados)?
Respuesta simple:
No tienes porque!
Simplemente tienes miedo a poner límites a los demás.
En lugar de decir en voz alta: "Viviré la vida que quiero" , te pones ansioso o incluso tienes ataques de pánico cuando piensas en la situación acojonada de decir "no".
¿No crees que es hora de retomar el control sobre tu vida?
¿Sabes que? Puedes aprender a establecer límites a los demás.
Puedes liberarte de esa cárcel de obligaciones externas.
Tranquilo. No entres en pánico. Es más fácil de lo que piensas.
La asertividad es tanto el objetivo como el camino al mismo tiempo.
Es la forma de liberarte de ser un agrado de las personas.
Es el objetivo final al que debes aspirar. Para tener confianza en la mayoría de las situaciones en tu vida.
Usa asertividad todos los días
Al hacerlo, estarás en una excelente posición para diseñar la vida que deseas.
Cierto, no siempre será un camino fácil, ya que hay muchas áreas que debemos cubrir.
Por ejemplo, es posible que seamos asertivos en nuestro círculo de amigos, pero no en nuestro trabajo. O al reves.
Aprende a utilizar este estilo de comunicación en la mayoría de las situaciones de tu vida, sin volverte loco.
Por supuesto, no tienes que dejar de ser quién eres realmente. Y tampoco tienes que convertirte en un idiota egoísta.
Pero sugiero que comiences aceptando que tus miedos son nada más que emociones irreales para que puedas ser la persona que quieres ser.
Bueno ... ¿Listo para tomar medidas?
Vamos allá!
La mayoría de las situaciones nuevas que nos sacan de nuestra zona de confort producen ansiedad.
Si recuerdas tu primer día en el trabajo o tú primer día del cole, sabes de lo que estoy hablando.
Totalmente natural. Porque tu cuerpo se está preparando para tomar acción. Si no estás acostumbrado a establecer límites, es normal que sientas miedos en ciertas situaciones.
Tu mente te dirá "No puedo" y te pondrás nervioso. Tu fisiología se disparará y tus piernas comienzan a temblar. Tus músculos se tensan. Tu corazón comienza a acelerarse y tu respiración se vuelve más rápida y superficial.
Es tu cuerpo el que se activa para actuar a través de la respuesta de “vuelo o lucho”.
¿Pero sabes que? Esos son solo sentimientos y pensamientos.
Algunas veces el cerebro es como un caballo salvaje que debemos domesticar. Tenemos que dejar de responder a ciertas emociones ó situaciones que no nos satisfacen.
Para un momentito ahora (sí, ahora mismo mientras lees mi artículo). Respire lentamente y salta al vacío haciendo el siguiente ejercicio:
Haz una lista de 5 situaciones en las que te gustaría decir “NO” o te gustaría establecer límites.
Ordena estas situaciones por dificultad.
Cierra tus ojos y ponte dentro de la escena más dolorosa.
Practica decir "No" para la situación elegida.
Pregúntate: "¿Qué es lo peor que podría pasar al decir que no (en esa situación elegida)?"
Bien, te espero aquí. Vete y haz ese ejercicio ahora mismo.
Hecho el ejercicio?
Guay.
¿Como te sentistes? Puedes responder en los comentarios abajo del artículo.
Cuando éramos niños, decir "No" era un sacrilegio. Nos enseñaron que decir "No" nos convertía en niños mal educados.
Hoy, como personas maduras, todavía nos aferramos a muchas de nuestras creencias infantiles.
Nuestras mentes inconscientes todavía asocian decir "No" con “ser irresponsable” o egoísta. Y esto todavía produce el miedo de ser un desagradable.
Como ahora sabes el origen del problema, aquí hay un pequeño truco mental que funciona:
La próxima vez que desees elegir 'Sí' en lugar de ' No' , dÍ a tu cerebro: "Cállate la p*** boca ... solo eres un pensamiento tóxico de mi infancia".
Y si lo dices con suficiente convicción y suficientes veces, hocus-pocus ... el pequeño monstruo que te da miedo desaparece. Porqué le quitas su poder.
Si tu vida depende de la aprobación de otras personas, nunca te vas a sentir libre.
Si siempre pides y confías en las opiniones de otras personas esto no es buscar buenos consejos. El mensaje que envías a tu inconsciente aquí es: " Su punto de vista sobre mí es más importante que lo que yo pienso sobre mí mismo".
Eso te hace decir ' Sí' cuando tu mente quiere decir 'No'.
Comprometerse a la meditación diaria te permitirá descubrir que todos tus miedos, tus creencias limitantes y tus dudas son sólo superficiales.
Y encontrarás un lugar más profundo de confianza y autoestima mientras te vas a conocer a tí mismo y quién eres.
Esto te permitirá decir 'No' con confianza y calma. Sin preocuparte por lo que el oponente piensa de tí.
¿Alguna vez te preguntastes por qué la mayoría de las personas que hacen ejercicio diariamente parecen firmes y seguras en sus decisiones?
Es porque lo son.
Si tu cuerpo es fofo, es probable que también estas fofo en tus decisiones. Inconscientemente envías una señal a otras personas de que eres fácil de convencer a decir " sí".
Tu postura y lenguaje del cuerpo blando es un alerón que señala a tu oponente que eres una presa fácil.
Tu oponente puede sentir que no puedes rechazar su solicitud.
El ejercicio físico es una de las herramientas más poderosas para obtener confianza y firmeza. (Es una pena que los psicólogos todavía no sugieran el ejercicio como un aspecto importante del tratamiento).
Tu mente es solo una parte del juego. Tu postura es otra. Ambos están vinculados entre sí.
Estoy hablando de psicología física. El "Efecto del ejercicio".
Los tríceps y bíceps fuertes, un trapecio y abdomen formados, envían al cerebro el mensaje de que eres poderoso.
Esto ayuda a matar el miedo. Ayuda a matar las dudas. Y ayuda a matar el desagradable hábito de complacer a las personas.
Una solución inteligente puede ser contratar a un entrenador personal que conoce la psicología detrás de esto.
Dile a tu entrenador personal cuáles son tus dos o tres objetivos principales en la vida, y un buen entrenador te ayudará a llegar a donde quieres llegar.
Aquí hay algunos ejemplos de cómo las partes de tu cuerpo pueden influenciar tus emociones y comportamiento:
Entrenar estas partes de tu cuerpo te ayudará muchísimo si tu mente todavía no es lo suficientemente fuerte (aún). Tu mente seguirá poco a poco, no te preocupes.
El resultado? Será menos probable que otros intenten aprovecharse de ti en cualquier forma.
Pero ojo! Esto no es una garantía. Esto solo funciona si tomas consciencia sobre tu cuerpo y consciencia sobre el por qué estás entrenando estas partes de du cuerpo. A lo mejor deberías empezar haciendo Yoga para aprender conocer a tu cuerpo.
Pon límites a todos aquellos que se aprovechan de ti.
Debes ser dueño de tu propia vida, y tienes todo el derecho de hacer con tú vida lo que te da la gana.
Tienes el derecho a fallar. Tienes el derecho a tomar tus propias decisiones, independientemente de que sean lógicas para cualquier otra persona.
Los pasos anteriores son un buen comienzo para cambiar la calidad de tu vida.
Ahora ve y cámbiate de ser un agrado de las personas a respetarte y amarte a ti mismo y estar en condiciones para decir con libertad" sí" cuando lo deseas y “NO” cuando sientes que debes decirlo.
Suerte.
Perfecto!!muchas gracias !!realmente es así y cuando hablas de los ejercicios realmente son fundamentales para la Salud mental corporal y espiritual.